Eduardo Relero. Capocha. 2021

A reflexionar…

El sujeto no es ni saber, ni no saber es desvanescente. Y el inconsciente está como lo no realizado en los intervalos discursivos.

En esos intervalos se encuentra la posición del sujeto, un sujeto que conocemos como sujeto del deseo no tanto insatisfecho……sino como No formulado.

El sujeto del inconsciente es donde no está.

El sujeto del inconsciente es lo propio del sujeto, pero de ninguna manera es lo apropiable por el sujeto.

El sujeto está como en su casa mientras sueña, ya que el sueño es la más pura re-presentación del inconsciente.

El inconsciente, dice Lacan es lo no realizado, indecible, lo que no se deja poner en palabras es importante la reflexión, porque lo que no se deja poner en palabras: El deseo. Y dice en los ESCRITOS de Lacan… “que el deseo no sea articulado, es precisamente la razón de que no sea articulable…Entendemos el discurso que le conviene ético y no psicológico. Pág. 765.

Los Imposibles:

Discurso del Amo: El imposible de gobernar lo Real.

Discurso del sujeto: El imposible de hacer desear.

Discurso universitario: El imposible de educar lo Real.

Discurso del analista: Imposible de analizar.

Lacan matematiza.

Ubica el saber del psicoanálisis en relación con otros saberes. Y sitúa al psicoanálisis en relación con el goce.

Si el sujeto no habla en Nombre Propio el Superyó habla en él.

A la metáfora del padre responde la metonimia.

La metáfora del padre fracasa siempre en borrar el Goce.

La castración no procede del padre, sino del lenguaje. Que se traduce en la pérdida de Goce, que afecta al sujeto en tanto que es el sujeto del lenguaje.

Hasta aquí por hoy.